Alrededores Platenses

Quiero contarles que hoy viví una maravillosa experiencia.

Todo comenzó cuando se me ocurrió mirar la página del grupo. Luego de leer sus relatos atrapantes, sentí la inquietud de participar. Lo único que me desanimaba un poco era programar el despertador para que sonara tempranito, justo un domingo! Pero el entusiasmo fue mayor y al fin me decidí!

Una vez que estuve en el lugar de partida, sentí inmediatamente el afecto, cuando parte de sus integrantes me daban la bienvenida. Los demás se fueron acoplando en la medida que íbamos llegando a los siguientes lugares de encuentro. Todos, absolutamente, mostraron la misma disposición. A pesar de estar en la estación más fría, el día resultó primaveral. Un sol radiante en un cielo totalmente despejado y una brisa suave acompañaron nuestro recorrido.

Tanto el Parque Ecológico, como las zonas rurales y el majestuoso Parque Pereyra nos brindaron sus senderos para que los transitáramos alegremente. Ni siquiera la pinchadura que sufrió uno de nuestros compañeros, logró desanimarnos. Una vez más la solidaridad del grupo se puso de manifiesto. Ni hablar del pic nic, que además de engañar a nuestros estómagos, nos ofreció la posibilidad de recuperar las energías necesarias para el regreso.

Y así, una vez más, pude comprobar cómo con las cosas más simples, podemos vivir plenamente nuestra vida, reconfortando el espíritu, mientras disfrutamos los beneficios que este deporte brinda a nuestra salud.

Ana Kitrilakis