El tango dice…”siempre se vuelve al primer amor”…hoy despuès de mucho tiempo volvì a compartir una salida con el Grupo la Loma. Gracias a ellos a fines del 2005 empecè a conocer el placer del cicloturismo en los caminos rurales. La primera alegria fue reencontrarme con compañeros de aquellos tiempos, Norma y Luis. A las 7.30 puntualmente emprendimos el camino por la 131..al llegar a 68 tuve la primera pista del recorrido inusual que Matias habia prometido. Por circunvalaciòn a 14, a 13 a 610 a 7 a 658 y despuès de reagruparnos los 15 o 20 que componìamos el grupo encaramos por el famoso y hoy polvoriento “Camino de Vacalin”. Pasamos por el Arroyo El pescado ( que tambièn acusa el efecto de la sequia)..y volvimos a reagruparnos a la sombra. El calor empezaba a sentirse, pero el ritmo de marcha se mantenia constante a 18 o 20 Km mas o menos. Como siempre lo caracteristico de este grupo: la solidaridad…si alguien se retrasaba..no quedaba solo, Matias u otro venian con ellos. La sombra se hizo mas frecuente cuando tomamos el camino que empalma con la entrada a Correas desde Bavio y trajo algo de alivio. Al llegar al ingreso a Correas..la ùltima novedad..seguimos 2 o 3 km hacia ruta 36 para girar a la derecha e ingresar a Correas por un camino con bastante arboleda y desconocido para mi…(tìpico de La Loma..siempre algùn sendero nuevo por descubrir). En I. Correas…el ansiado descanso, hidrataciòn, charlas, mate, anècdotas..y la infaltable foto grupal con la bici como trìpode y el disparo automàtico de la càmara. Regreso por la via hasta 612 (al que accedi luego que Matias jurara que no ìbamos a pasar por el temible puente que una vez tuve que atravesar gateando). Nos despedimos..algunos volvieron por 137 y otros seguimos por 610 hasta 13. Mas de 60 km recorridos y la sensaciòn que este grupo tiene algo especial…gratificante..distinto…no cambia con el paso del tiempo ni con la rotaciòn de integrantes en las salidas. Gracias a Luis ( hoy ausente) y por supuesto a vos Matias..

Jorge