Día del Padre en Correas

Hola qué tal… les hago el relato de lo que fue mi primera salida con el grupo.

Desde chico siempre me gusto andar en bici primero como es lógico por donde uno vive y después por algún que otro parque , y siempre quise salir por el medio del campo , caminos vecinales y ruta…casi como una aventura digamos , pero a raíz del deporte que practique casi toda mi vida que fue el rugby , se me complicaba realmente salir a pedalear los fines de semana , hasta que el miércoles pasado se me ocurrió poner en condiciones la bici para arrancar en serio y fue cuando charlando con la gente de la bicicleteria Soria sobre si conocían un grupo piola para salir me recomendaron la página de face y la web . Fue justo ahí cuando entre a la página y vi como era el tema, me decidí al instante en arrancar.

Para ser sincero mi primera etapa digamos fue ir hasta 131 y 44…hacia más de 10 años que no me subía a una bicicleta, una locura pensado el recorrido que me esperaba- y si llegaba! Mientras iba yendo pensé, “arritmia ahí vamossss” …pero llegue tranquilo, media hora antes de la hora establecida y justo cuando estaba en la esquina apareció otro chico y ahí me indico donde era justamente el punto de encuentro.

A medida que fue llegando el resto de la gente se notó enseguida la buena onda, la camaradería que había y eso fue una linda sensación que sentimos seguro todos los que fuimos por primera vez y fue al rato que llego Luis, saludo a todos y cuando le dije mi nombre me dijo “bienvenido”, ahí me di cuenta que había hecho bien en venir. Después pasadas la 9:30 arrancamos para el encuentro del otro grupo, y ahí fue increíble ver la cantidad de gente que éramos, llegue a contar más de 50 personas, impensado para un desconocido como yo de lo que era un grupo de ciclismo.

Una vez todos reunidos encaramos para 137 y de ahí en más para mí era ir a lo desconocido, desconocida la zona, y ni que hablar de mí y mi bici que no sabía si nos la íbamos a aguantar o iba a tener que llamar una grúa para nos trajera de nuevo jaja, y ya llegar a 137 fue una proeza, no lo podía creer y pensar que en auto es todo tan cerca…

Pero una vez que empezamos a alejarnos de la zona más poblada y apareció el campo, fue espectacular ver la polenta que le ponían todos y ritmo que llevaban, era motivadora la escena.

Pero bueno también en mi primera vez aparecieron mis primeros problemas, para empezar el pedal que se me empezó a soltar a la media hora de estar en ritmo, y ahí fue la primera demostración de solidaridad de un integrante del grupo que paro y me dio una mano en el medio del camino para que saliera adelante, un fenómeno. Después cuando llegue al primer reagrupamiento Luis le echó un vistazo a la bici y me ayudo a ajustarla de nuevo (la segunda vez, se me aflojarían una 20 veces más…). Pero la parte que estuvo increíble fue cuando encaramos para los caminos interiores de las quintas, huellas de campo con subidas y bajadas pronunciadas, un espectáculo el recorrido…y a medida que fuimos avanzando apareció cada paraje que nunca me imaginé que hubiera por esta zona.

Después fui empezando a sentir de apoco el cansancio,…y el bendito asiento! Una tortura!! Pero más allá de eso no tuve más que algún que otro contratiempo digamos como por ejemplo frenar casi de golpe sin avisar al que viene detrás y casi provocar un palo múltiple que por suerte nadie salió golpeado lo único si algún que otro pedal tatuado en la pierna por varios días jajaja- párrafo aparte para todos los que pararon a ver qué pasaba y como estábamos y a Luis que me curo y me hizo un vendaje que hizo que en dos minutos estuviera pedaleando como si nada y pensé con este apoyo es un placer salir. Y bueno después vino un calambre –de nuevo ahí estaba Luis y los demás para darme una mano- que me liquido media pierna pero gracias a los que me ayudaron seguí también nomas, con arrastres de Luis incluidos!

Ya en Correas pude descansar y premiarme con unos patys que para ese momento eran la gloria, y mientras tanto meditaba la vuelta para La Plata , y veía lo piola del grupo me llamo la atención que mientras que yo cansado me tomaba un gatorade había gente que se clavaba un Malbec! envidiable! Que fenómenos!!! Ya volviendo la zona de las vías fueron duras pero por el rosario de problemitas que venía arrastrado hacia… casi 60 km !

Una vez que llegamos a 137 en los Hornos me pareció increíble todo el recorrido que hice, las zonas que pase que ni conocía, lugares increíbles que atravesamos, todo.

Para terminar te quiero agradecer Luis por todo el apoyo que me diste durante todo el día para que terminara bien el viaje que fue increíble y mis totales felicitaciones por el grupazo que armaste con los años, que te siguen kilometro a kilometro donde sea que organices una salida…y a todos los que me dieron una mano cuando la necesite.

Esta fue mi primera salida, pero al Grupo La Loma lo voy a seguir!!!

Abrazo grande, Guillermo de Souza e Sá.