Nocturna a Poblet

Primera Salida – Primer Relato

El sábado 16 de agosto estaba muy entusiasmada con la salida nocturna que proponía el Grupo, tan solo me preocupaba el tiempo. Unas nubes negras presagiaban tormenta y con el pasar de las horas, no se definía.

Sólo me faltaba equiparme con las luces. A las 17:45 hs ya tenía todo listo, me cambié de ropa rápidamente, me puse el casco y al salir, sentí la llovizna.

¡Qué bronca!!!, dudé .., pero salí al primer encuentro si saber que iba a pasar.

Llegué al punto de reunión y allí estaban Luis, Verónica, Laura, Gustavo, el chico que conocí en mi intento fallido de salida y no recuerdo su nombre, entre otros. Luego llegaron algunos integrantes más: Eduardo y señora, Cecilia y el tío, etc. (perdón por los nombres que no recuerdo). En total éramos 17, que al parar de llover, emprendimos el viaje.

Yo no sabía hacia dónde íbamos, pero me dejé guiar por el grupo. Hicimos tramos sobre asfalto y por caminos rurales.

El tramo sobre asfalto tuvo algunos imprevistos – la cola o pata de un perro enredada en los rayos de la rueda delantera de uno de los chicos que iban adelante; un gato negro que al cruzarse provocó una maniobra que terminó con la caída de Laurita – después todo siguió sin más sobresaltos, bajo un cielo nublado. Los caminos de tierra estaban en buen estado, salvo un tramo con barro que nos desvió y llegamos a un puente, donde decidimos apagar las luces para apreciar la oscuridad y los sonidos del campo -. Continuamos viaje, pasamos por la estación de Poblet y así llegamos a Poblet.

Allí junto al almacén nos sentamos a tomar mate y a charlar disfrutando de la luna que apareció entre las nubes, minutos después de la eclipse. Nos sacamos la primera foto grupal.

Luego el regreso. Con la claridad de la luz de la luna, el paisaje era diferente. Llegamos al puente, volvimos a apagar las luces nos sacamos la segunda foto grupal y seguimos pedaleando. Al llegar a 167 decidimos seguir hasta la av. 66 para así volver a la ciudad de La Plata. A lo largo de la av. nos fuimos despidiendo de quienes nos dejaban para reunirse con sus familias. Nos re-agrupamos, hasta que con Verónica y el “bahiense”(?) hice el último tramo que término pasadas las 22 hs, y ellos continuaron.

Fue una experiencia inolvidable. La cordialidad y el diálogo fueron características me hicieron sentir muy cómoda, con gente que apenas conocía. Demás está decir que no pienso faltar a la próxima salida.

Virginia

Nuevo integrante se sumo al grupo al llegar a 66 y 167, María Laura recibe un mensajito donde le avisan que nació su sobrina, en un principio votamos por ponerle “Nocturna”, pero la mami le gusto mas Valentina (4,100kg.) un gracias total Dani y Mary por llevar a la tía M. Laura hasta la clínica, gracias chicos por la compañía y será hasta la próxima.

Grupo La Loma