Salida Aniversario a la Fiesta del Vino de la Costa

Llegué a la estación de trenes un poco antes de la hora prevista que era las 9,30 y ya se encontraba María de los Ángeles que se había tomado el micro para saludarnos y filmarnos un poco en la salida. Pobre Mary, a pesar de su problemita de la rodilla que no la deja subirse a la bici ella se esfuerza para estar siempre presente.

Al rato fue cayendo la gente de La Loma y se fueron mezclando con los ciclistas del Grupo Megabikers que venía desde Buenos Aires, algunos en tren y otros en auto. Lo interesante fue que de inmediato se armó un solo grupo, no había separaciones o “subgrupos”, éramos todos compañeros ciclistas solidarios los unos con los otros, lo cual se evidenció luego en cada una de las paradas por “pinchaduras” (que hubo varias, pregúntenle a Ernesto… ¡pinchó 5 veces!).

Salimos entonces por calle 1 todo el numeroso grupo de alrededor de 70 ciclistas y seguimos derecho hasta 71, de ahí subimos a 7 y de ahí fuimos hasta el fondo para tomar el camino de tierra “a Vacalín”. Ahí nos encontramos con un poco de barro en algunos tramos pero en general el camino estuvo bueno. Lo que sí estuvo excepcional fue el clima, parecía un día de primavera o verano. De hecho… hubo alguien que se metió a un arroyo… no me pidan nombre, por favor (quedate tranquilo Pablito) Uy, se me escapó… je je … Salimos entonces del camino de tierra al llegar a la ruta 11 y de ahí seguimos un poco por ruta hasta la parrilla donde unos pocos se quedaron comiendo algo y el resto, ya que éramos muchos y no nos podían atender a todos, seguimos el recorrido con la promesa de que nos esperaban los stands de comida (y de los otros también) en la Fiesta del Vino. Así que luego de un tramo más por ruta, pasando por el acceso a La Balandra, llegamos al “camino de las cañas” que es tan pintoresco y por el cual alguna compañera ciclista recibió elogios de algún productor vitivinícola que hasta le quiso regalar un vinito… NO pidan nombres! Bueno, doy una ayudita, empieza con Ce y termina con cilia (ji ji ji).

¡Y finalmente llegaron los Megas y los Lomenses al predio de la Fiesta del Vino! Fue impresionante ver todas las bicis estacionadas en frente de la pista de atletismo. Gracias Luis por quedarte cuidándolas mientras el resto íbamos por alimento. De todos modos, al rato estábamos la mayoría de vuelta disfrutando un poco del solcito que nos regaló esa tarde maravillosa, y sacamos la foto grupal (salió un poco torcida… sepan comprender… Fiesta del VINO…)

Bueno, de ahí ya solo quedaba la vuelta a La Plata por el camino del petróleo, así que en un ratito llegamos hasta la estación de trenes, donde despedimos a nuestros colegas y amigos Megabikers luego de haber recorrido juntos unos 75 km. Y los lomenses… nos despedimos por un rato ya que a la noche nos volvíamos a encontrar en la fiesta aniversario! Pero esa… es otra historia…