Gómez, sin entrar a al fondo
Llegamos a Gómez entre barro, lluvia, encuentros.
Nos acomodamos a la vera de la ruta, en el viejo y mágico almacén El Rondín.
Volvimos tranquilos. Gómez siempre está.
Llegamos a Gómez entre barro, lluvia, encuentros.
Nos acomodamos a la vera de la ruta, en el viejo y mágico almacén El Rondín.
Volvimos tranquilos. Gómez siempre está.