A los pagos de Don Gómez

¡Hola, queridos amigos!

Soy Marcela y quiero contarles que ésta es mi tercera salida con el grupo.

Realmente hacía mucho tiempo que quería empezar a pedalear, pero nunca me había animado. A veces creemos que no vamos a llegar a destino, por miedo o por vergüenza, no nos atrevemos a hacer lo que verdaderamente nos gusta.

Sabía desde el jueves que la salida sería a la estación Gómez; así que preparé todo, desayuné y salí al encuentro del grupo. En el camino me encontré con una pareja de principiantes y fuimos juntos hasta el punto de encuentro en 44 y 131. Nos sumamos al resto y cuando ya estábamos todos entre charlas y risas, comenzamos la aventura…

El día estaba espléndido, Sol radiante, la temperatura pronosticaba ser agradable a cada instante. Pedaleamos por asfalto, calles de tierra, cruzamos rutas, atravesamos caminos rurales, arroyos, puentes, anduvimos por entre vías abandonadas…, hasta que supe lo que se siente cuando se te sale la cadena… si si. ¡Qué susto! En una subida, un cambio mal hecho y la bici pedaleaba sola… ja ja

Pero lo admirable de todo esto es la solidaridad de los seres que acompañan a éste grupo. En todo momento te transmiten tranquilidad, energía para seguir pedaleando y asisten a quienes tuvieron algún inconveniente con la bici, haciendo paradas continuas para esperar a los que están demorados.

Así fue que al instante unos compañeros se acercaron a ayudarme, como así también lo hicieron con otros que pincharon la cámara más de una vez…

Al llegar, entre mateadas y fotos, disfrutamos juntos de un día maravilloso con buena compañía… Y qué les puedo decir…

A mi, ésta actividad me cambió la vida, hizo descubrir en mí muchas cosas que mantenía guardada desde hace mucho tiempo, “me devolvió al niño que tenía adentro”.

Hoy espero ansiosa cada domingo, ya no miro los km con miedo a ver qué puede pasar porque sé que en todo momento voy a estar acompañada por un grupo de gente maravillosa que no solo me permitió descubrir los lugares más próximos a mi ciudad, sino que también me dio la posibilidad de conocer y compartir experiencias con amigos, en las que cada encuentro me hacen sentir muy feliz.

¡Muchas Gracias!

Marcela.